De acuerdo con la Wikipedia, «un bot es un programa informático que efectúa automáticamente tareas repetitivas a través de Internet, cuya realización por parte de una persona sería imposible o muy tediosa». Un bot responde de manera automática, como una máquina imbécil, las mismas respuestas a un cuestionamiento. En los gobiernos actuales son muy comunes. Ante el descrédito de un mandatario, ante la cobardía de un mandatario que sale huyendo y que tiene miedo de dar la cara, para eso están los estúpidos bots. Pero hasta para usar bots hay que tener habilidad e inteligencia.
Arrojar los bots de manera poco discrecional, dando la misma respuesta estúpida es tirar el dinero a la basura. La cuenta del gobernador de Veracruz, el morenista Cuitláhuac García está custodiada por infinidad de bots. Baste con que alguien haga un cuestionamiento para que un ejército de bots “blinde” al gobernador; aunque en realidad sólo exhiban la estulticia del mandatario.
En la cuenta de Facebook del gobernador Amelia Olmos le hace un cuestionamiento sobre los muchos homicidios en Acayucan. «Se necesitan elementos que realmente hagan su trabajo y bien», señala Amelia. ¿Y contesta Cuitláhuac García? No, antes bien un ejército de bots celebra la incompetencia del gobernador. Otros bots hablan de una supuesta “estrategia” que no existe y por lo mismo no ha funcionado. Así con este gobierno imbécil que utiliza máquinas imbéciles para ocultar su imbecilidad.
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