En Sinaloa, los restaurantes en lugar de oler a comida, huelen a pólvora y miedo, señala una joven gerente

Sinaloa
En Sinaloa, los restaurantes en lugar de oler a comida, huelen a pólvora y miedo, señala una joven gerente FOTO: WEB

El pasado jueves 17 de octubre, tras la balacera ocurrida en Sinaloa, la gente quedó impactada y aterrorizada sin saber qué hacer. En una entrevista que se le hizo a una gerente de un restaurante de Sinaloa, comenta lo siguiente: «Todo lo que paso fue horrible, horrible», lamenta Adriana, gerente de servicio regional de un restaurante de comida china, «no queremos que vuelva a ocurrir lo mismo, porque fue horrible… Aunque nosotros seguimos con nuestra vida diaria, todo esto es muy doloroso, espantoso». El restaurante, dijo la gerente, ha quedado con un olor a pólvora que ni con cloro ni fabuloso se logra quitar, la comida huele a pólvora señala.

La joven gerente cuenta lo ocurrido ese día jueves 17 de octubre. «Todo era normal, los comensales empezaron a llegar al restaurante, festejaban de todo y al final se quedó en pesadilla, poco a poco el estacionamiento que tiene el restaurante subterráneo se empezó a llenar de “malandros”, la balacera estaba en su apogeo, el restaurante resistía los embates. Las balas zumbaban, la gente aterrorizada buscaba refugio y los empleados como si fueran socorristas, arriesgando su propia vida, empezaron a evacuarlos hasta la cocina, mientras gente quería tumbar la puerta, nunca supimos si eran soldados o de los otros», aclara Adriana.

Nuevamente los trabajadores arriesgándose pusieron lokers en la puerta, lograron que se desistieran a entrar. Fueron dos horas de infierno de 3 a 5 de la tarde. «Llegó la noche, mucha gente se arriesgó a salir, les pedíamos que no se fueran, había cuerpos tirados por la calle, estaban dos civiles que quedaron en el fuego cruzado. La gente de ese estado no logrará superar lo acontecido por mucho tiempo más bien se sabe que la vida sigue y con mucho temor  los negocios se han vuelto a poner al servicio del público».

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *