El día de ayer será recordado como el día que el Cártel de Sinaloa mostró el poder que posee, un poder inmenso, semejante al de los ejércitos rebeldes en Medio Oriente. Culiacán quedó sitiada. Se incendiaron tráileres, autobuses, se crearon barricadas para que nadie saliera, para que nadie entrara a la ciudad. Las personas se refugiaron en sus casas.
El gobernador de Sinaloa, tal vez escondido en un bunker, mandó un mensaje a la población, un mensaje nada alentador: “Les pido mantenerse a salvo y estar atentos a las cuentas oficiales de Gobierno del estado, estaremos dando información puntual, aquí estoy pendiente y trabajando para ustedes, compartan”. En pocas palabras, que cada quien vea por su seguridad. En ese momento el narco tenía el control.
Pero hubo alguien al que le valió madres la balacera, hubo alguien que no le tuvo miedo al Cartel de Sinaloa ni a sus armas de alto poder. ¿Quién? El de los tamales. Circula un video en el que se ve un auto sedán color guinda que circula por las calles de Culiacán con un equipo de sonido. El carro anuncia tamales, “a 10 pesos, tamales de dulce con queso Phil adelfia a 8 pesos, llegaron los tamales bien sabrosos que vienen los tamales”. Los que graban se ríen nerviosos, “al de los tamales le vale ver…; le vale madres a los de los tamales”.
*Hay balacera en Culiacán*
El de los tamales: pic.twitter.com/jm0HazVjnw— Jess 🐥 (@jessicasnchzr) October 17, 2019
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