Francisco de Luna / Poza Rica, Ver. Unos 800 trabajadores serían despedidos del Complejo Procesador de Gas (CPG) de Poza Rica, ante el riesgo de ser cerrado, debido a que continúa el desmantelamiento de la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex).
Los petroleros jubilados afirmaron que desde hace seis meses la industria petrolera redujo hasta el 70 por ciento de la producción del combustible de que no hay materia prima para producir.
El representante de la Organización de Trabajadores Activos y Jubilados en Defensa de Pemex, Francisco Reyes Jiménez declaró que actualmente el CPG sólo produce el 30 por ciento de su capacidad normal, y hasta el momento, las autoridades no muestran interés por reactivar las inversiones en este sector.
De concretarse el cierre de esas instalaciones petroleras también generaría el despido de al menos 800 empleados que actualmente están “de sobra” en algunas oficinas administrativas de la empresa productiva del estado.
«Tenemos un estudio que se refería al Complejo Petroquímico Escolín (CPE) que tenía su suerte unida al Complejo Procesador de Gas, porque por eso se establecía una criogénica para abastecer de gas al Complejo Escolín, pero si este complejo ya no está en funciones, la pregunta obligada es, ¿Cuál es la función del Complejo Procesador de Gas, precisamente por eso lo tienen trabajando al 30 por ciento de su capacidad, porque a quién le va a dar el gas», expuso otro de los extrabajadores de Pemex.
Los defensores de Petróleos Mexicanos afirmaron que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador no canceló la reforma energética como lo prometió en su campaña, por el contrario – dijeron – el desmantelamiento continúa y el petróleo sigue entregándose a manos de las compañías extranjeras, la tendencia es la privatización de la industria petrolera del país.
Ante el incumplimiento del Gobierno Federal de reactivar la industria petrolera en Poza Rica, los integrantes de la Organización de Trabajadores Activos y Jubilados en Defensa de Pemex anunciaron que realizarán una manifestación pacífica frente a los accesos principales del CPG, con la intención de exigir la cancelación de la reforma energética, y plantear la reactivación de Pemex en Poza Rica.
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