Una buena fotografía no se logra todos los días. Aideé, una joven de 24 años de edad, fue asesinada por un travesti que la atacó con una navaja a las afueras de un hotel en las calles de la alcaldía Cuauhtémoc en la Ciudad de México. Junto al cadáver de la muchacha, tendido en el piso, cubierto con una manta azul, puesta por la misma policía, se encontraba un hombre con el semblante entristecido.
El muchacho, que al parecer era su pareja, se encontraba vestido con pantalón de mezclilla, chamarra azul y una gorra violeta. En la foto el joven se ve que está a ras del piso, casi acostado; le acariciaba las manos al cuerpo ya sin vida de la que fue su pareja sentimental. Con tiernas caricias le palpaba el rostro.
A unos cuantos metros se encontraba un camarógrafo pendiente de la escena, esperando el instante adecuado para la foto. En el momento que los policías se descuidaron, el joven le quitó la manta al cuerpo sin vida de su novia dándole un tierno beso en la boca. El camarógrafo, pendiente de la escena, plasmó en su cámara lo ocurrido. El dolor del joven se volvió a notar, tanto que los policías, cuando se dieron cuenta de lo que había sucedido, no hicieron nada en contra de él sino que dejaron que el enternecedor instante siguiera su curso. Lamentable momento capturado en una foto. Hasta el momento no se sabe el motivo por el cual asesinaron a esta joven, pero se sospecha que podría ser un acto de celos.
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