«No sobrevive el más fuerte, sino el que mejor se adapta al medio», de acuerdo a una investigación hecha por la universidad de Boston, se ha descubierto que los corales marinos prefieren comer microplásticos (pequeñas piezas de plástico que contaminan el medioambiente) que sus alimentos naturales. Incluso si estos diminutos plásticos pueden matarlos. Pero el problema no acaba ahí, pues se descubrió además que, también peces, aves e incluso humanos consumen en pequeñas dosis microplásticos.
La bióloga marina Randi Rotjan, quien descubriese este nuevo hallazgo, declaró que cuándo empezó a trabajar con el entorno marino, nunca esperó centrase tanto en el microplástico que se encuentra en el agua: «Los plásticos siguen interrumpiendo la conversación, y es difícil ignorarlos. Eliges tu ecosistema, eliges tu organismo y es muy probable que encuentres microplásticos. No se limitan a comer pasivamente cualquier partícula que flota al alcance de sus tentáculos… Desafortunadamente, prefieren el plástico que la comida real».
Luego de tal descubrimiento, Randi lamentó la situación que se vive en los mares alegando: «Estoy aterrorizado por el desastre que hemos creado en nuestros océanos», dijo Rotjan, «pero esto es quizás parte de la historia para motivarnos a limpiarlo».
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