Con cada acto de agresión física, el perro intenta gemir de dolor, pero, tiene la boca amordazada. El video que tiene una duración aproximada de cinco minutos, podría estar vinculado con el crimen organizado, esto se debe a que las autoridades locales creen que se trata de un video tipo “snuff”, grabaciones que muestran contenido ilícito como violaciones, asesinatos y tortura. La producción de estos videos suele estar vinculada al crimen organizado.
Los videos de maltrato animal son los intereses de foros fetichistas, en ciertas páginas de internet o en la Deep Web, donde existe una demanda por este tipo de contenido. La Sociedad Para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales en Singapur fue alertada de la existencia de este video e interpuso una denuncia, aunque se ignora la procedencia de la producción. Así que emitió el siguiente comunicado: “Hay indicios de que el incidente pudo no haber ocurrido en Singapur, pero estamos explorando todas las posibilidades y solicitando urgentemente información creíble para buscar justicia para este cachorro. Si conoce la identidad y el paradero de la mujer, proporcione la información a la agencia correspondiente en su país”.