En la balacera que se suscitara hace unos días en Zapopan, Jalisco, murió Martín Arzola Ortega, alias El 53. En el restaurante del centro comercial donde ocurrieron los hechos estaba la esposa del gobernador de Nayarit, acompañado de sus escoltas. Ahora se sabe que ella no era el objetivo de los asesinos, el objetivo era El 53, quien operaba para Nemesio Oceguera, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), varias plazas de la zona. Los testigos hablan de dos tiradores, uno de ellos bastante joven que fue quien se acercó a Martín Arzola Ortega y de un disparo en la cabeza lo mató.
Los escoltas de la esposa del gobernador de Nayarit respondieron a los disparos y alcanzaron a ultimar a Bryan, el niño sicario de 17 años. Ahí quedó abatido el adolescente, en un charco de sangre y con la pistola en la mano. Los padres de Bryan acudieron a Semefo de Jalisco a reclamar el cuerpo de su hijo.
Los progenitores dicen desconocer a qué se dedicaba su hijo; tristes se han de haber sentido que su hijo de dedicaba a la delincuencia el día que lo asesinaron. Vale señalar que en esa balacera de Plaza Zapopan cinco personas que comían en el restaurante resultaron heridas y algunas aún se recuperan en hospitales de la ciudad.
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