El periodista Carlos Jesús Rodríguez, quien viviera en carne propia amenazas y agresiones por parte de los emisarios del gobierno de Javier Duarte, reflexiona sobre el caso del secuestro de Marcos Miranda Cogco, mejor conocido como Marmico. Carlos Jesús señala que, de acuerdo con los códigos del crimen organizado, estos no dan sustos, no dan escarmientos. Si una persona se metió con los intereses de algún grupo delincuencial, lo miembros del grupo afectado asesina sin consideraciones.
Pero lo que están haciendo con Marcos Miranda, si queremos creer lo de sus amenazas, puede ser un juego perverso causado por gente cercana al gobierno actual que piensa estar haciendo un favor al gobernador. En redes sociales los que quieren quedar bien con el gobernador insultan y amenazan. Afortunadamente esas amenazas no pasan de ahí. Pero hay otros que pasan a la acción, otros que son más atrevidos y hasta llaman por teléfono y amenazan a quien consideran está haciendo daño a la figura del gobernador y a su gobierno.
Marmico, azuzado por las supuestas amenazas, ya quiere que lo saquen de este país de mierda. Días antes, poco después de su secuestro, muy valiente dijo que él iba a seguir con su crítica, que no lo iban a callar. Pero al parecer bastó otra amenaza para que se quebrara y pidiera que se lo llevaran fuera del país a él y a toda su familia. ¡Así el drama!
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