De hecho, poseemos el oficio CBV/DRF/DA/1255/2016, fechado el 20 de octubre de 2016 donde el entonces director administrativo del Cobaev, Luis Alberto Cruz Rodríguez, daba cuenta al subsecretario de Egresos de la Sefiplan, Jorge Jaramillo Méndez, de las grandes cantidades de dinero que se entregaban a Érika Ayala. Del 2011 al 2016 Érika Ayala y su sindicato recibieron 208 millones 723 mil 761 pesos. Todo ese dinero por concepto de becas, apoyos y cuotas sindicales. Es mucho dinero, con razón la señora tiene hasta su helicóptero privado y varias casas en diferentes ciudades de Veracruz y de otros estados.
Pero como dijimos antes, todo esto se fraguó entre directivos y administradores junto con la propia Érika Ayala, quien nunca tuvo llenadera. La administración actual tiene todos los elementos para proceder. El fuero que posee la actual diputada no es excusa. Pero una cosa sí sabemos, si no proceden, entonces entenderemos que Érika Ayala logró convencer al gobierno de la Cuarta Transformación de cómo repartirse el botín.