En los tiempos de Harry “el culto” Grappa, Rodolfo “Chico Julio” Mendoza se le vendió como el organizador del Hay Festival, como el promotor cultural con más influencia en el estado de Veracruz y casi, casi de todo el país. El insulso de Harry Grappa se lo creyó, pero no sabía que el dipsómano funcionario era un “agarrapendejos”; por eso lo hizo director del IVEC. Los “agarrapendejos” son llamados de esa manera coloquial porque son tipos hábiles que ubican fácilmente a personas con escaso nivel intelectual y se venden ante ellos como lo más destacado en alguna materia, sobre todo en el arte.
Así es Roger Antonio Velázquez Silva, quien se vendió con la insulsa secretaria de Turismo y Cultura como el “non plus ultra” del arte en el país. Le habló a la señora de sus viñedos en Portugal, de sus viajes alrededor del mundo, de sus estudios en las universidades de Europa y la muy tonta le creyó todo. La verdad es que Roger Antonio Velázquez Silva es egresado de la Universidad Tecnológica de Gutiérrez Zamora, no tiene viñedos en Portugal, ni siquiera una huerta en el patio de su casa en Nogales. Monta exposiciones con obra de dudosa procedencia de la que no muestra certificados de autenticidad.
Si busca uno bien el señor tiene una demanda pendiente que interpusiera en su contra el fotógrafo Samuel Riao Russi; y eso que apenas lo estamos investigando. Xóchitl aseguró que ella no había contratado a nadie desde que llegó a Turismo, pero Roger ya está adscrito como “Asesor” en Turismo, sin ir a trabajar, inventando actividades, pero eso sí, con viáticos para viajar a España y a cualquier parte de la República mexicana; por cierto, en su ficha técnica no aparece foto alguna. ¿Pues de quién se está ocultando? ¡Y eso que apenas lo estamos investigando!
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