El mensaje de Cuitláhuac García sobre la tragedia ocurrida en Minatitlán no fue para condolerse con los familiares que perdieron un ser querido en la matanza, sino para intentar deslindarse echándole la culpa al fiscal Jorge Winckler. ¿Pero a quién se le ocurre? Contrario a él, Alfonso Durazo fue más inteligente: «En este desafío debemos trascender diferencias democráticas legítimas e impulsar un espacio para coincidencias sin regateos de todos los poderes y niveles de gobierno del Estado mexicano».
Las críticas y los insultos para el gobernador de Veracruz no se hicieron esperar. Susana García le dice: «Gobernador, ¿En serio se pronuncia casi 4 horas DESPUÉS de los hechos? ¿Y todavía tiene la sin vergüenza de, como siempre, hablar mal del actuar de la Fiscalía? Le recuerdo que la PREVENCIÓN es cosa SUYA y de su gabinete»; el Candigato Morris les preguntó: «¿El aventar culpas soluciona los problemas? A los veracruzanos no nos interesan sus pleitos políticos. Tienen gobierno federal, control de senado y mayoría en los congresos ¿Eso no es suficiente? ¡¡Resuelva en vez de twittear!!»
El periodista Jorge Berry hasta le molestó que Attolini, un palero de AMLO, se pusiera de parte de Cuitláhuac García: «Tú y el gobernador @CuitlahuacGJ son patéticos. Uno lamiendo suelas, y el otro asignando culpas, en lugar de mostrar un poco de empatía con la gente. Son un asco».
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