La monocromía de la 4T

4T
Yazmín Esquvel, la nueva magistrada de la 4T FOTO: WEB
- en Opinión

Luis Ramírez Baqueiro / 

“Nadie se ha perdido aún en un camino recto.” – Johann W. Goethe.

La manera en que la Cuarta Transformación de México visualiza el horizonte político y por supuesto fragua planes para lo que habrá de venir solo tiene una óptica.

La monocromía empleada los hace pensar que o se esta con ellos o en su contra.

Con ellos no existen medias tintas, mucho menos sanas distancias, jamás piense que se puede conciliar, porque no, aquí “la bebes o la derramas” como señalará el filósofo de barrio Felipe Ferra Gómez alías “El Ferraz”.

Y aun cuando el presidente López Obrador ha admitido que en sus 100 primeros días de gobierno lo único que a contenido en términos absolutos ha sido el crecimiento delincuencial, pero no así su combate frontal, ni mucho menos su disminución, contrario a ello, se ha agravado el desempleo abierto y se ha frenado el crecimiento económico.

La visión monocromática del actual proyecto gobernante comienza a mostrar el verdadero rostro, por un lado, la injerencia constante en asuntos de otros poderes es una forma de desvanecer su autonomía y separación de poderes, para convertirlo en mecanismo de control centralista.

Así un día envía de magistrada a Yasmín Esquivel a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, siendo la esposa de su mejor amigo empresario José María Riobóo, como propone ternas para integrar la Comisión Reguladora de Energía (CRE) sin contar con los perfiles necesarios para ello, bajo el argumento que servir a la patria los exonera de responsabilidad o culpa.

Aun cuando soterradamente la intensión sea la de nombrar sin pasar por el tamiz que por Ley marca el ser aprobados por el Senado a los que quiere y pretende colocar, como apuntará el senador Julen Rementeria del Puerto.

El senador veracruzano advierte, el presidente busca jugar con una laguna legal en la determinación de si son 30 días naturales o hábiles para poder pasar lo que por hecho sabe no encontraría el consenso necesario de las bancadas.

Pero, así como esa, por otro lado, opera su intensión de aparecer en la boleta electoral del 2021, bajo la argucia legal de la revocación de mandato, y con ello, impulsar a los candidatos de su partido y de paso, porque no perpetuarse en el poder.

Quizá en esa monocromía visual de la 4T se comienza a asomar esa verdadera intensión, cuando observamos casos como el de intervenir el presupuesto del Organismo Público Local Electoral del Estado de Veracruz (OPLE) a través de disminuir su recurso anual a través de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), que de manera unilateral recortó lo aprobado para 2019 por el organismo autónomo.

Lo grave de esto es que ya por ahí surgió quien pide la desaparición de los OPLES a nivel nacional porque les parece que la democracia es muy cara y duplica funciones.

Y bajo ese falaz argumento, construir, llegado el momento, la posibilidad de quedarse eternamente en la Silla del Águila -presidencia-, como la llamará el ex gobernador Miguel Alemán Velasco en uno de sus libros.

Lo cierto es que atentos debemos estar los ciudadanos, atentos a no olvidar con la facilidad que tiene esta sociedad nuestra para dejar las cosas, en ese baúl del olvido, y no tatuarnos con fuego los hierros cometidos por este gobierno que de entrada prometió hasta el perdón de los pecados.

La visión monocromática de la 4T hace precisamente pensar que en democracia solo existe un proyecto, el suyo, lo demás estorba, esta rancio y viejo, e impide la consumación del sueño del caudillo, que convertido en presidente pretende pasarse a ser un nuevo dictador.

Al tiempo.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *