La versión de que el gobierno mexicano espiaba a los personajes más importantes de la vida pública fue, por muchas décadas, un secreto a voces. Todos lo sabían, pero no existían elementos o pruebas que comprobaran estos dichos, hasta ahora. Recordará que la semana pasada el presidente ordenó la apertura de todos los archivos del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, los cuales se encuentran resguardados en el Archivo General de la Nación, en el famoso Palacio de Lecumberri. Pues ya los primeros nombres de quienes fueron espiados han salido a la luz, y literalmente, nadie se salvó.
La lista es enorme y tan diversa que podemos asegurar que los gobiernos de México tenían una idea total de qué sucedía en todas las esferas de la sociedad. Claro que hay políticos, el mismo López Obrador cuenta con un expediente, y al expresidente Salinas de Gortari lo espiaban desde que este era un estudiante universitario. Nombres como Vicente Fox, Tatiana Clouthier, Cuauhtémoc Cárdenas y Alejandro Encinas figuran en la lista. Periodistas como López-Doriga, Jacobo Zabludovsky o Julio Scherer, también fueron objetivo del Estado.
¡Vaya!, hasta los artistas María Félix, Silvia Pinal, Ignacio López Tarso y Juan Gabriel cuentan con su expediente secreto en el que se detallan las actividades que tenían dentro y fuera del país. Los activistas tienen un apartado importante, y hasta delincuentes de la talla de Caro Quintero, Félix Gallardo y Ernesto Fonseca. Con decirle que, hasta Octavio Paz, Carlos Monsiváis y la Reina Isabel aparecen en la lista de espiados. Los archivos apenas se han abierto, y seguro que pronto nos habremos de enterar de más y más nombres.
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