La verdad es que la licencia de Héctor Yunes como diputado federal no es para ocupar alguna secretaría o subsecretaría en el gabinete de Cuitláhuac García. Dicen por ahí que el gobernador no puede ni ver al priista con el que ya contendió en una campaña. La licencia tampoco es para asesorar a su hija en el Congreso veracruzano; que buena falta le hace. Dicen los que lo conocen, y se comunican con él, que Héctor Yunes se someterá a una operación quirúrgica. Ojalá salga bien, si es que en verdad será operado.
Sin embargo, otros que conocen bien al diputado de Soledad Doblado, dicen que Héctor Yunes va a aprovechar la licencia en el Congreso Federal para caer al abordaje sobre los restos del PRI. Y es que por ahí ya se escucha que el exsenador Pepe Yunes ya está preparando un proyecto para revivir al PRI estatal. Y como siempre, Héctor quiere ser la piedra en el zapato de Pepe Yunes.
Es interesante que el hecho de la licencia de Héctor Yunes haya despertado la rumorología a la veracruzana. Como si fuera una fiera herida, algunos creen que Éric Cisneros recibirá un disparo político para ya sacarlo de la jugada y evitar que siga haciendo daño, y si no es Héctor ya tendrá que ser otro para sustituirlo. Por supuesto Cuitláhuac García no le va a dar el gusto a los veracruzanos que piden la cabeza del Bola 8; él lo va a sacar cuando menos lo esperemos.
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