Los perros de raza pitbull han sido estigmatizados por ignorancia como perros agresivos o letales para ser criados en familias con niños; sin embargo, nuevamente dan muestra de que eso solo es un tonto mito urbano. Y es que si no fuera por una perra de esta raza, llamada “Sasha”, un bebé de siete meses y su familia hubieran muerto incinerados en casa, pues la mascota de ocho meses de edad alertó a los inquilinos del hogar de un fuerte incendio que comenzó en el complejo de apartamentos a los cuales pertenece la vivienda en Stockton, California.
El complejo de casas comenzó a ser rodeado por grandes llamas y Nana Chaichanhda, madre del bebé, se encontraba afuera, pero la cachorra Sasha comenzó a actuar de forma extraña golpeando la puerta trasera de la vivienda. La mujer no comprendió pero le abrió la puerta. “Le abrí y ella entró corriendo y comenzó a ladrarme como loca, yo dije está bien, esto es raro, esta no es ella”, comentó la mujer a medios locales de California.
El instinto de protección que tienen los perros de raza pitbull predominó. Por ello, la cachorra sacó al bebé arrastrándola hasta la calle, no la jaló de un brazo o pierna, la inteligencia del animal la incitó a sostenerla del pañal como un lazo. Cabe destacar que estos animales son conocidos también como “perros niñera”, pues muestran mucho afecto con las personas, sobre todo con los niños, y existen diversos estudios sobre la inexistencia de una base científica que pueda vincular la agresividad del perro con su raza.
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