Bonita primera semana de esta Cuarta Transformación en Veracruz. Cuitláhuac García toma posesión el 30 de noviembre a las 23:58 horas. Pensamos que le urgía gobernar, pero ahora nos damos cuenta que le urgía poner en libertad a los exduartistas. En tropel salieron los exfuncionarios que desfalcaron a Veracruz del penal de Pacho Viejo; hasta les pusieron el taxi en la puerta del penal para que corrieran a solicitar juicio político en contra del fiscal Jorge Winckler. Ya las solicitudes de Reyes Peralta y de ONEA se opacaron entre tanta solicitud.
Nos comentan que hasta se abrirá una ventanilla especial en el Congreso de Veracruz para que los ciudadanos que quieran puedan solicitar juicio político en contra el fiscal. Luego vinieron esas acusaciones, que es el viejo gobierno el que pactó con los duartistas y que al actual no le quedó de otra que dejar que sus procesos se lleven a cabo en libertad. El fiscal dice que no, que es el nuevo gobierno el que pactó con los exduartistas para dejarlos en libertad. El hecho es que todos los acusados quieren salir. Porque o todos hijos o todos entenados.
Los escupitajos van de un lado a otro y hasta alcanzaron al presidente del Tribunal Superior de Justicia, quien recibió un escupitajo en la cara cuando el tartajeante gobernador dijo que hasta que no se aclare su participación, la de Edel, en actos de corrupción, no iba a comer huevos con jamón, café de olla y tortillas de mano con él. Una semana de la Cuarta Transformación y mucha de la prensa desempolva su vocación abyecta con la esperanza de que les den, aunque sea, una limosnita por el amor de Dios.
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