Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. Se planteará la integración de Veracruz a un sistema nacional de salud, para mejorar la atención médica a la población.
El gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, aseguró que dicho tema se pondrá sobre la mesa de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
El entrevistado indicó que la atención médica no ha sido la mejor, toda vez que se ha hecho por partes.
«Está el ISSSTE por un lado, el IMSS, los hospitales generales por otro lado, tenemos que ir hacia la instancia universal, integrándose de tal manera que en tres años podamos garantizar que un ciudadano acuda a cualquier centro de salud y pueda ser atendido, de manera gratuita y con los medicamentos gratuitos».
Se trata de un plan que podría implementarse durante los próximos tres años, mediante la coordinación con la Secretaría de Salud del gobierno federal.
«Ya estoy hablando con el doctor Ramos Alor, (secretario de Salud de Veracruz) y otros especialistas para que logremos integrar en Veracruz el sistema nacional».
En otro tema, refirió que existe un “hueco” financiero de 30 mil millones de pesos heredado por los dos últimos gobiernos de Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes Linares.
Sin embargo, negó que la Federación planee rescatar financieramente a Veracruz.
«Son varios mecanismos financieros, pero varios de esos no se pueden anunciar porque son tratos con los bancos, con casas crediticias y queremos tener el mejor trato, pero no se va a endeudar más el estado».
Revisión de rutina a fiscal de Veracruz
Cabe destacar que García Jiménez dijo desconocer sobre la revisión a las camionetas del Fiscal General del Estado, Jorge Winckler Ortiz, por parte de elementos del Ejército Mexicano.
Además, indicó que el Congreso local determinará si se procederá con las solicitudes de juicio político contra él.
«Van varias solicitudes, todas se van a revisar, si la entregan ante la instancia, será el Congreso el que debe externar esa opinión».
Asimismo, argumentó que no tuvo oportunidad de escuchar el audio que envió el exsecretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, detenido en Pacho Viejo, quien acusó al Fiscal y exfuncionarios estatales de someterlo a presiones y tortura para realizar acusaciones en contra de personas como Javier Duarte.
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