Ya se los habíamos dicho, una cosa es decir y otra cosa es hacer. El secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros sólo se exhibió como un porro, amenazando que iba a meter a la cárcel a Jorge Winckler. Curioso, por un lado, López Obrador habla de perdón e indulgencia y por el otro su devoto siervo rabiaba en contra del Fiscal de Veracruz. Bueno, ya es secretario de Gobierno, ya es poder, ¿en qué butaca nos sentamos, compramos palomitas y vemos cómo lo corre y mete a la cárcel?
¡Cómo si fuera tan fácil! Patrocinio Cisneros sabe de operaciones electoreras, pero por lo visto sabe poco de leyes. Jorge Winckler ya advirtió que él no va a renunciar, “nadie puede obligarme a renunciar”. Sobre los procesos de juicio político en su contra señala que “hay una instancia Legislativa, hay otra en el Poder Judicial y hay una instancia en la Suprema Corte de Justicia” y a cada una de ellas acudirá.
Al parecer, por lo menos, tanto el gobernador como el secretario de Gobierno van a tener que estarse tomando la foto con Winckler unos dos años en lo que esto se resuelve, y si se resuelve a favor de Winckler, él será quien les diga “bye”. Sobre las acusaciones de ONEA y Jorge Reyes «Mariposa» Peralta, ¿cómo, no saben quienes son estos sicarios? Les hicieron creer que todo era muy fácil, pero Reyes Peralta lleva ya diez años tratando de meter a la cárcel a Yunes y no lo ha conseguido; quiso evitar que Maryjose Gamboa fuera diputada y ella hasta se reeligió; ¿en esa gente confían?
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