Le pregunta Carmen Aristegui al presidente electo Andrés Manuel López Obrador si le cae bien Enrique Peña Nieto. AMLO evade la pregunta, la periodista le dice: «Parece que sí». A López Obrador no le queda de otra que matizar su respuesta. Respeta a Peña Nieto porque el actual presidente no metió las manos en la contienda, y eso que, relató Andrés Manuel, se lo pidieron los empresarios a Peña Nieto hasta en dos ocasiones; pero Peña no cedió.
Quizá por ello Peña Nieto se ganó una invitación a la casa de AMLO, invitación que el presidente electo anunció de esta manera: «Invité a comer a mi casa al presidente Enrique Peña Nieto. Como es de dominio público, me he reunido en otras ocasiones con él por razones de carácter institucional. Ahora, por primera vez, nos encontramos para definir el programa del 1 de diciembre y también en plan amistoso porque le agradezco sus atenciones, y es probable que sea la última entrevista que sostengamos en este periodo de transición».
¡Van a terminar siendo brothers!
Comentarios