Lo noche del miércoles 7 de noviembre, Manuel Huerta, dirigente estatal de Morena, se encontraba en el restaurante Vips de Plaza Cristal. Estaba acompañado por Carlos Marcelo Ruiz Sánchez, dirigente del Partido Verde. La plática giraba en torno a la votación que el día de hoy, jueves, se llevará a cabo en el Congreso de Veracruz para elegir al presidente de la Junta de Coordinación Política.
Los dos contendientes contrastan por su preparación y su trayectoria. Amado Cruz Malpica ya tiene un periodo de experiencia, pero además su preparación académica es importante. El otro es Juan Javier Gómez Cazarín, el Carón, quien es abogado, tuvo una derrota electoral, está relacionado con el asesinato del periodista Cándido Ríos pero, es compañero de juergas del gobernador Cuitláhuac García. Huerta decía que hasta el momento el ganón había sido el PT, que se quedó con la Mesa Directiva. De acuerdo con Huerta sólo les falta un voto que les permita poner al presidente de la JUCOPO, ¿a cuál? Nuestro informante no alcanzó a oír, pero si escuchó la anécdota del “mago” Herrera, ese que puso varios votos en la urna y que de recompensa lo hicieron alcalde de Papantla.
La lógica, la decencia no permitiría dudas sobre quién es el mejor calificado para la JUCOPO. Pero el gobernador electo, quien dijo que no iba a intervenir en las decisiones de la Legislatura, empuja para que su compañero de baile, el Carón, vinculado al asesinato de un periodista, sea el bueno. Lo mismo hace en la SEV, donde ya se encaprichó por poner a su “Tarzan Boy”, Zenyanzen, quien también es su compañero, pero en otras lides.
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