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El elemento que no puede faltar durante las festividades del Día de Muertos es sin duda el famoso Altar para los fieles difuntos. Los hay en diferentes tamaños, colores y con elementos diversos que han cambiado con el paso de los años y las generaciones aunque su esencia es la misma: alimentos que gustaban a quienes se nos adelantaron, velas, imágenes religiosas, flores, incienso y papeles de colores.Lamentablemente, esta vistosa tradición mexicanas también se ha visto afectada por la austeridad que cada día padecemos más los mexicanos, pues basta con ver las fotos del antes y después para sentirnos como la Bartola de Chava Flores, tratando de hacer que nos alcancen los pesos para comprar lo mismo que cada año planeemos para el altar de muertos.
En una rápida encuesta con nuestros amigos, podemos ver por ejemplo que este gasto puede variar desde los 100 pesos hasta los 450 pesos para el caso de los más pudientes que tratan de conservar íntegros sus elementos que según la revista de la Universidad Veracruzana, “La Ciencia y el Hombre” explica, consiste en la colocación de una mesa o repisa cuyos niveles representan los estratos de la existencia.
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Y no es de extrañarse, con eso de que la canasta básica se encuentra en mil 591 pesos con 40 centavos, el pensar en adquirir productos extras es un reto, pero lo importante es conservar las tradiciones. Una de estas encuestadas dice que su altar consta de 5 pesos de dulces; 10 pesos de una calavera y jamoncillo; 5 pesos de flor de cempasúchil; 15 pesos de pan de muerto; 10 pesos de tamales; 3 pesos de incienso; 15 pesos de caña; 25 pesos de veladoras y 10 pesos de pabilos para unas velas. ¿Y tú, cuánto gastaste en tu altar de muertos?
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