El libro del Éxodo 22:25 dice: «Cuando prestares dinero a uno de mi pueblo, al pobre que está contigo, no te portarás con él como logrero, ni le impondrás usura» (logrero: Persona que da dinero a logro. persona que procura lucrarse por cualquier medio). Al parecer a Bernardo Quezada, secretario de créditos del SNTE, le viene guanga esta sentencia bíblica. Ya que él fue quien le facilito a Héctor Peredo, su suegro y a su esposa Jesica Peredo Rincón, dueños de ETESA, la cartera de los maestros.
Desde la cúpula del propio sindicato magisterial, se maquinó que se retrasaran los préstamos verdes y rojos que otorga el ISSSTE, para que los maestros se vieran en la necesidad de encharcarse con esta leonina empresa que cobra hasta cinco veces la cantidad prestada. Pero que es ETESA: se trata de Ediciones, Tratados y Equipos SA (ETESA) y Consorcio Peredo SA, que según el Ministerio Público de la Federación, formaban parte de la red de blanqueo de dinero creada por los angelitos de la disidencia magisterial en Chiapas.
Hoy nuevamente ETESA está en el ojo del huracán por la demanda de dos personeros de la maestra Gordillo. Como ya vimos, la empresa en cuestión es propiedad de la familia política de Bernardo Quezada Salas, un antiguo protegido de Elba Esther Gordillo Morales y exdiputado del Partido Nueva Alianza (Panal). Su delito es confabular con el mismo sindicato para que los maestros solicitaran esos leoninos contratos. Ojalá y en esta ocasión se aplique la ley y prospere la demanda de sus antiguos aliados.
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