Queremos a Duarte en la cárcel, eso es lo que importa a millones de veracruzanos agraviados por un criminal que pretende impunidad. A los veracruzanos nos queda claro que el gobierno de Peña Nieto lo benefició con una corta sentencia. Pero el gobierno de Peña Nieto termina el primero de diciembre. El próximo secretario de Gobierno de Veracruz dice que a él no le preocupa que Duarte pueda salir de la cárcel, a él le ocupa acusar a Winckler, el abogado que supuestamente hizo mal las cosas.
No señor Cisneros, sus prioridades están mal enfocadas, primero queremos que se aseguren de que Duarte no salga de la cárcel, que se sumen a él las sentencias pendientes, que se proceda conforme a la ley; exigimos que ustedes, el gobierno de Morena, presione para que la justicia de López Obrador no sea como la de Peña Nieto.
Si después de asegurarse que Duarte siga en la cárcel por muchos años, le da tiempo de ver el actuar del fiscal Winckler, entonces proceda conforme a derecho. No tuerza sus prioridades por una venganza política.
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