Hay cosas en este mundo que no tienen límite. El espacio no lo tiene, el tiempo tampoco, pero estos dos conceptos se quedan cortos ante la estupidez de algunas personas. Xalapa corre el riesgo de inundarse de basura. No hay dónde depositar los desechos sólidos que los xalapeños originan. Hay muy poca cultura ecológica y muchas personas no tienen consciencia ambiental y por ello, en lugar de tener la basura en su casa, la sacan a la calle y consideran el problema resuelto.
Ante ello, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares ha ofrecido el apoyo del Gobierno del estado al alcalde Hipólito Rodríguez para resolver el problema de la basura en la capital del estado que, ciertamente, es el asiento de los poderes el Estado. Pues en su estupidez muchas personas, en lugar de agradecer el gesto solidario, reprochan el supuesto “oportunismo” del gobernador.
En su estulticia esas personas preferirían que la basura cubriera toda la ciudad que aceptar la ayuda del Ejecutivo del estado. Valentín Arrieta San Román, el que armaba buenas fiestas para su jefe Vicente Benítez en la SEV, dice: «Qué tipo tan oportunista, que resuelva los problemas del estado, que son un chingo, bien dice el dicho: ve la laja en el ojo ajeno, sin ver la viga que trae clavada». Ya ven el espacio, el tiempo y la estupidez no tienen límite.
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