Nunca, nunca la ciudad de las flores había estado tan descuidada. Por donde usted vaya tendrá que batallar con los baches. Si sube o baja la avenida Américas, tenga cuidado, de los dos lados el cemento esta cuarteado y en otros tramos se han formado unos baches de gran tamaño. Si usted circula por la avenida 20 de noviembre la situación está peor. En la Ruiz Cortines el encarpetado de asfalto se ha levantado con las lluvias de temporada y eso sin meterse a las colonias periféricas que están para llorar. Y a todo esto, la respuesta del ayuntamiento xalapeño se ha visto tibia.
Deje de lado la filiación política de las autoridades municipales, se trata de gobernar, administrar, atender a los usuarios y satisfacer los servicios de la ciudadanía, y hasta el momento no se ha visto agilidad e inteligencia en la solución de estos problemas.
Tal parece que las intrigas palaciegas y guerras intestinas entre los miembros del ayuntamiento han acaparado gran parte del tiempo del alcalde morenista. Esta situación ha dejado de lado lo que es verdaderamente importante.
Faltan menos de 100 días para llegar al primer año de gobierno municipal y hasta el momento no se ha visto el estilo ni la presencia de un gobierno diferente. Si el alcalde sigue empeñado en gobernar como hasta ahora lo ha hecho, tenga por seguro que la ciudadanía se lo recordará. Los xalapeños son tolerantes, pero no son tontos, no todo es recaudar impuestos, se trata de ser recíprocos.
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