AMLO-Anaya o Cuitláhuac-MAYM

Anaya
Ricardo Anaya Cortés y Damián Zepeda Vidales FOTO: WEB
- en Opinión

Salvador Muñoz / La repentina aparición pública de Ricardo Anaya Cortés a un mes de las elecciones, hace que la pregunta que se mantenía en el aire aterrice: ¿Por qué no buscó López Obrador la reunión con el segundo lugar en las votaciones y sí con el tercero, representante electoral de un partido que aparentemente tiene un pie al borde de la extinción y donde ya se habla hasta de cambiarle de nombre?

Anaya Cortés subió a sus redes sociales (la vi en Facebook) una foto al lado de Damián Zepeda, dirigente nacional del PAN. La reacción, al menos en su perfil, fue de regocijo pero de verdad, la aparición de Ricardo volvió a replantear esa pregunta: ¿por qué no buscar primero a Anaya?

II

Para algunos, la reunión entre López Obrador y José Antonio Meade fue como parte de la reconciliación que requiere el país… sí, puede ser… pero de eso a llenar de elogios al ex candidato del PRI, como que sigue sin cuadrar a quienes votaron por AMLO.

Para otros, fue la reunión con el puente que de un modo u otro, es el enlace con los hombres de negocios que hay en el país… y hasta fuera de él.

La percepción general es que López Obrador sucumbió a lo que tanto luchó: pactó con la Mafia del Poder… o en otras palabras: ya es parte del Sistema.

Claro que para otros más, el hecho de que haya buscado la reunión con Meade y no con Anaya, obedece a un interés más político que otra cosa: Pepe Toño, aun siendo ex candidato del PRI, representa todavía al Sistema en el poder y bien podría ser vista tal reunión como parte del proceso de transición… pero no por ello el temor de que esto implique una carta de indulto al Gobierno que fenece, florece en aquéllos que votaron por la esperanza.

Al final, como sea, la pregunta vuelve a repetirse… ahora que aparece en público Ricardo Anaya, ¿AMLO también buscará la reunión con el ex candidato del PAN?

III

Llevando al plano estatal el escenario que generó López Obrador con Meade, hubo quienes en la aldea jarocha aventuraron a imaginar en el gabinete estatal a Yunes Zorrilla (“Digo: si Meade va a Banxico, ¡pues Pepe a Sefiplan!”), incluso, hasta otros más lo ubicaron en la subsecretaría de Gobierno. Si a usted le generó risa, a mí aún me duele el estómago. No tanto por la urgente necesidad de aquellos pepistas que añoran la máxima del Tlacuache Garizurieta, sino porque es claro que entonces, nunca conocieron el carácter del peroteño.

¡Ah! Y si eso fuera poco, lo que me responden éstos es que si no va Pepe al Gabinete, entonces ¡su hermano! Yo creo que en la desesperación de quienes desean hacer realidad ya sea al PRI-Mor o mantener a flote la esperanza de regresar a la vivencia del presupuesto, ya hay quienes ven como director de RTV a Ramsés Yunes

IV

A diferencia del espectro político nacional, donde hay quienes aplauden a López Obrador y su reunión con Meade, en el estatal difícilmente se ve un acercamiento entre Cuitláhuac y Yunes Márquez planteando la misma tesis que a Meade: el ex candidato del PAN no deja de representar al Gobierno que en cinco meses o menos, concluye, pues lejos de buscar la conciliación de la que tanto habla el líder moral de Morena, pareciera que la confrontación es la única vía que en Veracruz, al menos en lo que se ve, se ha de esgrimir… habrá que ver qué llega más pronto: si la reunión de AMLO con Anaya… o la de Cuitáhuac con Chiquiyunes… o ninguna de las dos.

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