«Arianna la tirana», fue el título de una documentada denuncia hecha pública en enero del 2015 en Libertad Bajo Palabra, por los atropellos ciudadanos cometidos por la alcaldesa contra la población de San Andrés Tlalnelhuayocan que infaustamente gobernó esta mujer. Despojo e invasión de propiedades fueron su especialidad. Las fechorías de esta dama continuarían cuando estuvo al frente de OMNPRI de manera simultánea a la alcaldía.
Su presencia despótica culminaría cuando fue nominada como candidata del PRI a la diputación de Coatepec, no sin antes llevarse hasta los muebles de las oficinas de OMNPRI que ocupaba. Una vez consumada su derrota electoral en Coatepec, en días pasados, inició la grilla para regresar a OMNPRI apoyada por la vieja guardia priista que encabeza Carlos Brito.
En la sumatoria de fechorías, Arianna Ángeles fue señalada de quedarse con los cinco millones que le entregó Silvio Lagos para «invertirlos» en su victoria electoral, mismos que no fueron aplicados a la operación electoral en su distrito. Es Arianna, la tirana, recordada en su municipio por haber construido en el mismo centro de Tlalnelhuayocan, a un lado de la presidencia municipal, dos arcos del triunfo en terrenos privados. Arianna es fiel exponente de las rémoras del lapidado PRI.
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