Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. Decenas de aficionados derramaron cerveza frente a Palacio de Gobierno, tras el triunfo 1-0 de la Selección Mexicana contra Alemania en el Mundial de Rusia 2018.
La gente vivió el debut en Plaza Sebastián Lerdo de Tejada. Carpas y uña pantalla de gran tamaño fueron colocadas en el lugar para observar el partido.
Algunos gritaban picardías cuando un jugador desaprovechaba una oportunidad de gol. Otros sólo miraban con atención el encuentro.
Todo fue festejo, emoción y sorpresa cuando cayó el primero y único gol del partido. Hirving Lozano, actual jugador del equipo PSV Eindhoven de la Eredivisie, había recibido la asistencia de Javier Hernández, recortado con magna con la pierna izquierda y abatido al portero alemán.
Portaban playeras de la Selección Mexicana, banderas, gorros, máscaras de luchador, pelucas y otros artículos con los colores patrios.
Después de 93 minutos de juego, el triunfo despertó la alegría en los mexicanos, quienes exhibieron su estado de ánimo con gritos, porras, silbidos y brincos en el centro de la ciudad.
Se tomaban de los hombros y desfilaban en círculo de emoción.
La calle Juan de la Luz Enríquez se pintó de verde, blanco y rojo. Los aficionados bloqueaban la vialidad. Agentes de tránsito resguardaban la zona.
Los aficionados se rociaban cerveza y espuma en aerosol, mientras bailaban y gritaban: «¡México, México, México!».
Para la mayoría fue sorpresiva la victoria del equipo mexicano sobre el campeón del mundo.
Los ciudadanos alzaban la bandera mexicana con gran orgullo y fervor. El desempeño de la Selección Mexicana en su primer partido del certamen fue histórico.
Las demás calles del centro de Xalapa lucieron vacías, mientras el partido se llevaba a cabo.
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