Luis Ramírez Baqueiro /
“La patria es Primero.” – Vicente Guerrero.
Mientras México vive momentos de alta excitación, producto de la actitud mezquina y por demás taimada del actual presidente de los Estados Unidos de Norte América, Donald Trump.
La respuesta del Gobierno Mexicano finalmente llegó.
El presidente de todos los mexicanos, nos guste o no, Enrique Peña Nieto, respondió a la serie de amenazas y actitudes intimidatorias emprendidas por la Casa Blanca contra nuestros país y sus connacionales presa de la actitud beligerante de su mandatario.
Muy “ad hoc” viene a mi mente la letra de nuestro Himno Nacional, misma que alude victorias mexicanas en batallas y trata sobre la defensa de la patria.
Dentro del cuerpo de sus estrofas y estribillo las cuales fueran compuestas por el poeta potosino Francisco González Bocanegra en 1853, resalta un párrafo el cual cita así:
“Mas si osare un extraño enemigo
profanar con su planta tu suelo,
Piensa ¡Oh, Patria querida! que el cielo
un soldado en cada hijo te dio».
Y no es que quiera ponerme catastrófico, mucho menos, convidar al pueblo de México a levantarse en armas en contra de los gabachos, sino solo reflexionar sobre como en momentos de desgracia nacional, nuestro pueblo, siempre sale al unísono a defender su integridad.
Y es que el mensaje que este jueves envió el presidente Peña Nieto, ha sido categórico, austero y republicano.
Por primera vez en sus casi seis años de mandato, el presidente de todos los mexicanos ha fijado una postura enérgica y contundente respecto al actuar del vecino del norte.
Ese que por naturaleza pretende humillar y esclavizar a todos los pueblos del orbe, pero especialmente, aquellos que lo hacen ver miserable en el manejo de sus políticas migratorias, así como en el manejo de su política económica, que a todas luces busca beneficiar a los grandes capitales norteamericanos.
La respuesta puntual de Peña Nieto al referir «No tendremos miedo a negociar, pero nunca vamos a negociar con miedo«, muestra por primera vez una postura a la altura de su investidura.
Su llamado al dialogo, al señalar “Si usted quiere llegar a acuerdos con México, estamos listos. Como lo hemos demostrado hasta ahora, siempre dispuestos a dialogar con seriedad, de buena fe y con espíritu constructivo.”
“Si sus recientes declaraciones derivan de una frustración por asuntos de política interna, de sus leyes o de su Congreso, diríjase a ellos, no a los mexicanos. No vamos a permitir que la retórica negativa defina nuestras acciones.”
La pieza discursiva construida para el mandatario nacional, puntualiza, “Sólo actuaremos en el mejor interés de los mexicanos.”
Y remata “Evocando las palabras de un gran Presidente de los Estados Unidos de América: no tendremos miedo a negociar. Pero nunca vamos a negociar con miedo. Estamos convencidos de que, poniéndonos de acuerdo, como amigos, socios y buenos vecinos, a ambos países nos va a ir mucho mejor que confrontándonos.”
Así refiriéndose inclusive a los cuatro candidatos presidenciales, el presidente de México, mostró cohesión y unidad ante el hostil vecino.
La postura del Gobierno Mexicano demuestra que por encima de las diferencias la unidad nacional es primero, siempre basada en el “respeto mutuo”, como apuntó el mandatario nacional.
Cierto es, lo citado por Peña Nieto, solo, “Hay algo que a que todos, absolutamente a todos los mexicanos nos une y nos convoca: la certeza de que nada, ni nadie está por encima de la dignidad de México”.
Al tiempo.
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