De la cordura a la locura

Locura
De la cordura a la locura FOTO: WEB
- en Opinión

Édgar Landa Hernández / Las grandes mentes en torno a la literatura han visto transformar y más aún trastornar los sentidos mediante la palabra escrita. Las mentes iridiscentes han sido en diversas etapas la luz que prodiga la sutil gentileza de un alma enamorada o de una extasiada mente que a través de compases lúdicos se caracterizan por dejar una huella mediante sus obras. A lo largo de la historia han existido grandes escritores que después de un paso avasallador en el mundo de las letras han terminado cediendo terreno a la locura. Posteriormente de haber compuesto obras excelsas, ha sido la mente que les ha jugado una mala carta dejando la cordura en la fantasía y la locura en su realidad.

En la obra de el quijote podemos ver un caso donde la locura se sobrepone a la cordura dejando una enseñanza en la cual nos guía mediante la sinrazón a encontrarnos en una realidad tangible que denota cuál es la verdadera razón de la evidencia. A final de cuentas descubrimos que palabras más palabras menos la lucidez se aparta de una masa encefálica dando rienda suelta a una locura sin igual, ahí tenemos el caso de célebres escritores que marcaron toda una época y que al final la locura se encargó de ellos, incluso a unos hasta quitarse la vida.

Tal es el caso de  Nietzsche , Edgar Allan PoeLovecraftFranz Kafka, Jonathan SwiftErnest Hemingway, león Tolstoi, El Marqués de Sade, Jean Jacques Rousseau. Excelentes seres existenciales ansiosas de encontrar una realidad embellecida por la idea del arte de la escritura y sobre todo de la alegría que da el placer hacerlo o el mismo dolor de crear.

Escribir es el arte donde se conjunta la ficción con la realidad, el lugar ideal para cercenar los enquistados e intrínsecos sentires para dar rienda suelta a una demencia que profesa el gran sabor que da la cordura.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *