Dicen que una golondrina no hace verano, pero cuando se tiene la mano firme y temple, los resultados son evidentes. En el caso de la delegada federal del ISSSTE, Elizabeth Morales García, quien se encuentra en un campo difícil, ha sabido sortear los obstáculos con inteligencia. Al menos en la cínica de Xalapa ha sido bien recibido el cambio de la dirección.
Las riendas de tan importante clínica ahora están en manos del doctor Hugo Azamar Espejo, y la subdirección a cargo de la doctora Miroslava Lagos Rivera, quien maneja una política de puertas abiertas. Se nota buena coordinación con el cuerpo médico y enfermeras.
Bien por Elizabeth, quien no olvida el trabajo social que ha hecho a lo largo de su carrera política. Por cierto, en la entrada de la clínica se ha instalado un módulo que tiene por propósito recabar y atender las dudas y quejas que tengan los derechohabientes sobre el área de urgencias.
Y es que como lo ha dicho la propia delegada, «porque nadie puede estar esperando cinco horas la primera atención en urgencias». Ojalá y otros funcionarios pongan también en primer lugar las necesidades de sus derechohabientes. Un reconocimiento a Elizabeth Morales García y a su grupo de profesionales que le rodean.
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