Bien pudo ser un error, bien pudo ser que lo sabían y de alguna manera se quedaron con la lana de esos pensionados a los que supuestamente les llegó su pago de Sedesol, pero resulta que ya estaban muertos. El caso es que hay maneras de verificar si las personas que reciben pensión por parte de la Sedesol están o no vivos.
El caso es que la Auditoría Superior de la Federación detectó que se pagó pensión a 16 mil 997 beneficiarios que ya estaban fallecidos. La pregunta es, ¿a quién se le quedó ese dinero? ¿Se les quedó a los parientes que se presentaron con un falso pensionado, o con falsas cartas poder? ¿Se le quedó a quienes tienen la responsabilidad de entregar los cheques?
¿Se les quedó a los delegados de Sedesol, quienes finalmente son los responsables de que el apoyo a los adultos mayores llegue a los que en realidad lo necesitan? O de plano ese dinero ni siquiera salió de Sedesol federal y sólo simularon la entrega.
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