Jorge Díaz Bartolomé / Inicia el año y con éste una nueva administración municipal, grandes son los retos que enfrenta el actual gobierno municipal en materia de rescate de nuestra identidad.
En los últimos cuatro meses de la pasada administración, se lograron cambios significativos en la pavimentación del Centro Histórico, con algunos desaciertos, principalmente en la calle Dr. Lucio y el inicio de la calle Revolución, donde se cubrió parte de la piedra de una de las calles mejor logradas en Xalapa. Aquellos trabajos fueron realizados en 1949 por la Dirección de Obras Públicas a cargo del orizabeño Álvaro Aburto durante el gobierno estatal de Ángel Carvajal Bernal; la cantera fue traída directamente de Querétaro.
Es importante mencionar el cambio en la Dirección de Desarrollo Urbano ahora a cargo de la arquitecta América Carmona Olivares, quien tiene la responsabilidad de aplicar el reglamento en la capital veracruzana, hablemos principalmente de banquetas, mamparas y anuncios espectaculares, apropiación de espacios públicos para convertirlos en privados, y tratándose del polígono del Centro Histórico, una enérgica reglamentación en los anuncios exteriores y el cada vez más continuo uso de bocinas hacia la calle con volumen alto en las principales calles del centro.
El histórico puente Atenas merece la atención del Alcalde Hipólito Rodríguez, así como el puente paralelo y su X, actualmente una de las obras urbanas más agresivas a la vista en el Paseo de Los Lagos. Pero quizá el reto más importante y que ninguna administración municipal ha querido afrontar, es el transporte público, con miras a un mediano y largo plazo. Los graves problemas de vialidad que se viven en la capital veracruzana se deben principalmente a que no se tienen unidades de transporte público de calidad y a una falta de planeación eficiente, por lo que, trasladarse en horas pico de oriente a poniente y viceversa resulta un calvario.
La nueva administración tendrá que buscar alternativas de movilidad, designar recursos para mejorar el transporte colectivo y ésto se reflejará en la calidad de vida de los xalapeños.
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