El contexto que les ha tocado a los jóvenes mexicanos vivir está lleno de cambios y transformaciones. Se han enfrentado a una política llena de reformas políticas que supuestamente buscan que México sea más democrático. Sin embargo, los jóvenes mexicanos muestran una hastió y desilusión por la política al conocer los actos de corrupción de sus gobernantes.
Según datos de Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los jóvenes mexicanos no se interesan en la política. Cuando se les hizo la pregunta, ¿qué tanto te interesas en la política?, los jóvenes mexicanos en general mencionan estar “poco” (46 por ciento) o “nada” (43.2 por ciento) interesados en la política.
Estas percepciones sólo confirman la apatía en este sector de la sociedad, lo cual repercute negativamente en la consolidación y funcionamiento de la democracia mexicana. Y si añadimos que los jóvenes no ven acciones que traigan progreso al país, pues sencillamente prefieren mantenerse alejados de las actividades políticas.
Por esa razón sería bueno que los candidatos, antes de presentar propuestas frescas, primero traten de persuadir con buenos argumentos a los jóvenes para que éstos se metan más de lleno en la política.
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