Para nadie es un secreto que Delfina Gómez avanza a paso firme por la gubernatura del Estado de México; serena, ecuánime y concentrada busca el voto de los mexiquenses; sin los reflectores de los otros candidatos. Su propuesta resulta interesante en un estado que se lleva los primeros lugares en inseguridad y pobreza. La maestra sabe de la capacidad del PRI para acarrear gente, comprar votos, coaccionar y comprar autoridades que validan el voto. Ahí es donde se debe de prestar mucha atención.
Uno de los puntos débiles de Morena y su candidata es su estructura, ésta presenta debilidad y no cuentan con la suficiente cobertura de casillas, es ahí donde el tricolor se regodea y casualmente obtiene mayor votación. Por otro lado, un punto a favor de Delfina Gómez es que gran parte del magisterio está ofreciendo su apoyo a su propuesta, y gran parte de la sociedad civil estará vigilante de los resultados.
Por el momento no es tiempo de confiarse para la candidata de Andrés Manuel López Obrador, al contrario, es tiempo de apretar más el paso.
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