En redes sociales y en algunas páginas espurias salieron con la noticia de que un comando armado había acribillado a la periodista Carmen Aristegui. Además del portal que difundía la noticia, también apareció una foto del comentario de una supuesta cuenta de Joaquín López-Dóriga, quien lamentaba la muerte de la comunicadora.
Afortunadamente Carmen Aristegui goza de muy buena salud, eso lo confirmó Javier Solórzano, quien la tarde del domingo 5 de marzo habló con ella confirmando que «está tan bien como siempre». Ya quisieran sus enemigos acallarla de cualquier manera.
Ya Peña Nieto consiguió que la familia Vargas le quitara su espacio noticioso a cambio de unas cuantas monedas de plata. Carmen Aristegui y su equipo de investigación fueron los que dieron a conocer la Casa Blanca del presidente, emblema de la corrupción en este sexenio. El golpe le sigue doliendo a Peña Nieto, pero el presidente debe saber que los enemigos de Carmen Aristegui son también nuestros enemigos. ¡Larga vida a la gran periodista!
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