Las redes sociales son una espada de dos filos si no se usan correctamente, puede meter en problemas al usuario o meter en dificultades a otros. Muchos se sienten poetas, suben poemas editados, otros dan consejos de matrimonio y de vida sexual y muchas personas sacan su rencor a la sociedad y a la vida. Otros escriben verdaderas sandeces. Por ejemplo, otros opinan sobre temas particularmente complejos, como la aplicación de la ley con el nuevo sistema de justicia penal (NSJP); opinan sin conocer las reformas.
La salida de Leonel Bustos Solís, exdirector del Seguro Popular con Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa, acusado de malversar dos mil 300 millones de pesos del área de Salud, fue considerado como un fracaso de la Fiscalía General del Estado (FGE) por la mayoría de los usuarios de Facebook; muchos postearon con las vísceras y la ignorancia, nunca, ni remotamente, le echaron una ojeada al nuevo código, incluso algunos diputados también atribuyeron esta acción como un fracaso para la Fiscalía.
Si en el futuro sale Bermúdez, César del Ángel o cualquier otro angelito mediante un amparo federal, no significa que están libres de delito, más bien seguirán su proceso en libertad hasta que se les libere completamente o se les finque auto de formal prisión. Esas son las bondades del nuevo sistema de justicia penal que aprobaron los diputados, por cierto, la mayoría priistas.
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