Y que se sube el gallo Bolo a la tribuna para denunciar acoso en contra de su persona. Según comenta, el pintoresco diputado Ernesto Cuevas iba por una carretera cerca de la comunidad de Carranza cuando fue interceptado por una patrulla de la Policía Estatal. Según el diputado los policías hicieron que bajara del auto junto con sus acompañantes y los revisaron para ver si no portaba un arma. Dice el popular gallo Bolo que no importó a los policías que les dijera que era diputado. Otro día, afirma el gallo Bolo, iba a pagar una manda, vistiéndose de “naquito” para la morenita del Tepeyac y también notó que lo seguían.
Por esta razón pidió la comparecencia del secretario de Seguridad Pública para que explique ese acoso. Fueron varios los diputados que se pronunciaron a favor de que compareciera Téllez Marie y explique, incluso los diputados panistas. Quienes conocen a Ernesto Cuevas sabe que al señor le gusta la tomada. En cierta ocasión, en una fiesta de Naolinco, unos periodistas fueron testigos de los desfiguros que hacía el entonces alcalde de Juchique de Ferrer.
Excedido de bebida se le atravesaba al cantor Nicho Hinojosa, se quería tomar la selfie con él e importunaba al cura del pueblo. Conociendo como es el gallo Bolo, quien para su camioneta en pleno flujo vehicular atrás de Palacio, nada más para bajarse donde se le pegue la gana, en una de esas el tiro le sale por la culata y se descubre que en realidad el señor anda haciendo alarde de su fuero y se mueve por esos territorios con plena impunidad, poniendo en riesgo a los habitantes de su distrito.
Comentarios