Dice el dicho que no es indio el que no se venga, y no importa que sea un religioso. El padre Alejandro Solalinde fue uno más de los perseguidos por el régimen de Javier Duarte de Ochoa. Solalinde estuvo constantemente señalando los crímenes que se cometían en contra de los migrantes centroamericanos en su afán por llegar a los Estados Unidos. Estos crímenes cometidos por bandas delincuenciales tenían el respaldo de las autoridades migratorias de Veracruz.
La policía de Veracruz también fue denunciada por los múltiples abusos en contra de los migrantes. Es por ello que el padre Solalinde era una persona non grata para el gobierno criminal de Javier Duarte. Pues ya se las está cobrando Solalinde al dar a conocer el supuesto paradero de Javier Duarte de Ochoa: «¿Quieren saber dónde está Javier Duarte? Aquí las coordenadas», es lo que declaró Solalinde, además dio las coordenadas de un rancho en Chiapas supuestamente del suegro de Javier Duarte.
Quizá debido a estas declaraciones es que el gobierno de Enrique Peña Nieto se está apresurando para anunciar la detención de Javier Duarte, que según Solalinde, siempre estuvo vigilado, pues las autoridades nunca le perdieron la pista.
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