La culpa fue de los padres, si ellos hubieran disciplinado a sus hijos, si hubieran aprovechado la oportunidad que les brindaba el padre de Daphne, la joven víctima, seguramente no estarían donde están, a un paso de que los juzguen por violación tumultuaria a una menor de edad.
Pero los padres no pensaron que sus hijos hubieran hecho algo que muchos jóvenes de la sociedad veracruzana hacen, no pensaron que tener sexo con menores de edad fuera un delito, pues todos sus amigos lo hacían. El único castigo que recibieron los llamados Porkys fue un jalón de orejas y después un viaje a Las vegas unos, y otros más, fiestas desenfrenadas.
Después amenazaron al padre de la víctima y alentaron a las familias a irse con injurias contra la víctima. Ahora uno de ellos, Diego Cruz, será extraditado a México para ser juzgado por el delito de violación a una menor de edad. Ahora lloran como si la vida no les hubiera brindado una oportunidad.
El juez español Alfonso Guevara se dio prisa para dictar una resolución desfavorable para el joven Diego Cruz que se encuentra en España preso, pero que regresará a México a enfrentar la justicia. De nada valió el llanto ni las mentiras de haber sido amenazado para que se confesara culpable. Pero Diego, no le eches la culpa a otros, la culpa es de tus padres.
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