Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. El fiscal de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras, presume que si la siguiente legislatura decide separarlo del cargo, será por cuestiones políticas y no por la ineficacia que diversos sectores han señalado.
El funcionario estatal se dijo dispuesto a trabajar con el próximo gobierno panista, que encabezará Miguel Ángel Yunes Linares.
Sin embargo, en días pasados el coordinador de la bancada panista, Sergio Hernández Hernández, declaró que una las prioridades de la próxima legislatura sería la destitución del titular de la Fiscalía General del Estado (FGE).
«Si las fuerzas políticas se congregan en la legislatura y determina que Luis Ángel Bravo debe dejar la silla de fiscal general, la decisión que se tome será de estricta naturaleza política».
A su juicio, los panistas buscan que el cargo quede disponible para colocar a alguien de su confianza, que garantice la procuración e impartición de justicia durante los siguientes dos años.
«No guardaré silencio. Me complace mucho que en futuro diputado refiera que analizará mi permanencia a la alta responsabilidad de fiscal».
Cabe recordar que el desempeño de Bravo Contreras ha sido criticado por periodistas, familiares de desaparecidos y otros sectores por el nulo esclarecimiento de los casos pendientes.
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