Muchos maestros oficialistas, pegados a la ubre del SNTE, y otros de reciente ingreso desdeñaron a los maestros de la CNTE. Los medios de comunicación televisivos también hicieron su parte. Los juzgaron como revoltosos y flojos, sin embargo, este grupo de maestros, hoy tienen al Gobierno Federal de rodillas. El gobierno de Peña Nieto se ha visto obligado a cumplir las peticiones de los maestros disidentes.
La madrugada de este sábado fue puesto en libertad el profesor Efraín Picazo Pérez, dirigente del sector estatales de la sección 22 de la CNTE, detenido la madrugada del 29 octubre del 2015. Los maestros que supuestamente fueron despedidos en Oaxaca, han sido reinstalados. La titular del INEE, Sylvia Schmelkes, tuvo que salir a declarar que la «evaluación docente puede ser voluntaria»; los diputados y senadores y la arquidiócesis de México han salido a declarar que la Reforma Educativa merece ser revisada.
Es un hecho que la CNTE aparece en todo el país como una corporación organizada que en muchos estados ha rebasado al sindicalismo oficialista representado por el SNTE. Hoy existe la posibilidad de que la mayoría de los trabajadores de la educación, sobre todo los organizados en la CNTE u otras corrientes de oposición, aprovechen la coyuntura y se decidan a rebelarse e imprimir un nuevo paradigma al SNTE, agrupación que nació corrupta y que no quiere ser democratizada.
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