El discurso del Quijote sobre la Dulcinea del Toboso y el esplendor de la imaginación; hoy en la Quinta de las Rosas

Quijote y SanchoEntre las aventuras de la Sierra Morena, el Ingenioso Hidalgo decide hacer penitencia por su amada; para que ella se entere de su proeza decide enviarle una carta a su Dulcinea del Toboso. Cuando Sancho Panza, el emisario, le pregunta dónde habría de entregar la carta, Don Quijote le da como referencia la casa de Lorenzo Corchuelo; a la hija de este hombre deberá entregar la carta. Entonces Sancho Panza admirado le pregunta: «¿Que la hija de Lorenzo Corchuelo es la señora Dulcinea del Toboso, llamada por otro nombre Aldonza Lorenzo?». «Bien la conozco —dijo Sancho—, y sé decir que tira tan bien una barra como el más forzudo zagal de todo el pueblo. ¡Vive el Dador, que es moza de chapa, hecha y derecha y de pelo en pecho, y que puede sacar la barba del lodo a cualquier caballero andante o por andar que la tuviere por señora! ¡Oh hideputa, qué rejo que tiene, y qué voz!». Más que molestarse por otra más de las impertinencias de Sancho, Don Quijote le dice uno de los discursos más memorables de este libro. A este discurso se dará lectura el día de hoy viernes, por una ocasión especial, en el taller Libertad bajo Palabra de la Quinta de las Rosas. La cita es hoy a las 16:00 horas en la Casa Grande.

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