Juanelo, Mónica y Héctor

- en Opinión

Al inicio de la sesión foránea de la LXIII Legislatura del Congreso local, realizada en MInatitlán, empezó con 39 diputados, dispensándoles la falta a cinco con el clásico pretexto: “por realizar actividades propias de su encargo”. No importaba… había el suficiente quórum para dar inicio a la fiesta brava que motivaba el morbo para esta sesión… el desafuero de Juanelo.

En punto de las once de la mañana, un remolino de reporteros se hizo a la entrada del salón de usos múltiples Radevs, recinto legislativo. El objetivo: Héctor Yunes Landa. Las preguntas clásicas y las respuestas consabidas con un tinte de humor por parte del Senador: “Siempre he sido adelantado… malo que fuera retrasado”.

Si Héctor Yunes alguna vez presumió su calificación de excelencia en la facultad de Derecho, entraba a terreno donde alguien más podría hacerle competencia de tal reconocimiento… no, no era Jorge Wade González, quien se sentó junto al Senador ante la sorpresa de muchos. No era para menos… algunos recordaban la serie de desencuentros que habían tenido… pero no… al final, fue una mañana de reencuentros, pactos y promesas entre dos viejos-nuevos amigos.

Nos referimos a Guadalupe Porras David, quien sacó 10 de promedio en la facultad de Derecho, allá en la generación de los 70, según confesó a Rafael De Hombre López, presidente de la Unión Ganadera de Coatzacoalcos, quien lucía un collarín. No tiene ni una semana que le dieron una “madrina” y ya anda en la grilla. Lo de la “madrina” es porque fue uno de esos vehículos que le pegó por alcance a su camioneta y lo volteó.

El aplausómetro inició con la presentación de los invitados como el alcalde Héctor Cheng Barragán, el petrolero Jorge Wade, el magisterial Juan Callejas Roldán, la cenopista Guadalupe Porras y el Senador Héctor Yunes Landa, siendo estos tres últimos con los decibeles más altos.

Claro que el aplausómetro también pasó a las curules y sí, Ciro Félix Porras fue de los más aplaudidos y cómo no, “trae Porras”, dijo su madre.

Lalo Robles Castellanos, diputado y dirigente del PVEM, en plena sesión, abandona su curul y se dirige a la zona VIP para saludar a Héctor Yunes Landa. Abacho y apapacho.

Otro menos discreto fue Renato Tronco Gómez, quien además de llegar tarde, le gritaba al senador: “ahí estamos… ahí vamos” o algo así, pero le levantaba el dedo pulgar muy efusivo desde su curul.

Mientras está en tribuna Tava Ortega, sin empacho alguno se levanta Juan Nicolás Callejas, se atraviesa el recinto, intercambia algunas palabras con Julen Rementería y Joaquín Rosendo Guzmán. Al minuto, Belén Fernández del Puerto se les une. Otro intercambio de palabras y salen del recinto El Chapo y Belén acompañados de Paco Portilla Bonilla… aparentemente fueron a dar entrevistas… es lo que queremos creer pues Vicky Hernández iba y venía hablando con reporteros de micrófono en mano que pedían exclusivas.

Tava Ortega aprovecha un momento para felicitar por su “cumple” a Alfredo Gándara y Octavio Pérez Garay, así como por “adela” a Julen Rementería, que lo festeja este jueves. Renato Tronco empieza a canturrear “las mañanitas”.

(De Iván Calderón: “Chava, ¿sabes cómo felicitan a Alfredo Gándara? –¿Cómo– pues lo rodean, ¡no lo abrazan!”)

Y mientras Mónica Robles pretende llevar ante el Congreso de la Unión la iniciativa para que se reforme el artículo 19 Constitucional a fin de agregar el delito de Feminicidio, sobre todo con el propósito de garantizar la protección de un bien jurídico mayor, como es el derecho a la vida y la seguridad de las mujeres, Belén Fernández del Puerto, que ya había vuelto a su curul, le contaba al oído a Callejas Arroyo con negativas, ojos grandes y ceño arrugado cómo le había ido a donde haya ido.

Y mientras el desafuero del alcalde de Coatepec, Roberto Pérez, Juanelo, se daba con 43 diputados, afuera, el reclamo de ciudadanos se daba de distintos matices; algunos, pidiendo hasta por Limpia Pública en su colonia; otros, por ayuda a discapacitados; unos más, gritando que cómo se les impedía el acceso para intentar hablar con sus diputados. Y el receptor de estas quejas así como de saludos y muestras de apoyo fue el Senador Héctor Yunes Landa, quien fiel a su costumbre, fue el primero en salir del recinto legislativo… sí, preferible ir adelantado que retrasado.

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