López Obrador pide a los militantes de Morena que no hagan todo lo que él hace contra sus adversarios: «No mentir, no utilizar estas cosas para perjudicar a posibles adversarios»
Cuando le conviene, cuando tiene que defender a uno de los suyos, aunque nates haya sido de García Luna, López Obrador es capaz de caer en contradicciones. Por ejemplo, después de que Alejandro Encinas asegurara que Omar García Harfuch sí estuvo en las reuniones donde se empezó a fraguar la famosa “verdad histórica”, el presidente salió a defender al candidato favorito de Claudia Sheinbaum: «Cuando le preguntan a Alejandro Encinas que, si estaba en esas reuniones o había principado Harfuch, él dijo que sí proque eso es cierto. Pero eso es distinto a que haya participado en la desaparición de los jóvenes».