Claudia Sheinbaum se siente cómoda de indolente con Lía Limón; le dice que no haga «que no haga circo»
A ratos se le observa preocupada, callada y con la mirada lejana, nos referimos a Claudia Sheinbaum, quien antes de la tragedia de la Línea 12 del Metro y de los resultados de la elección pasada, donde la oposición logró conquistar y arrebatarle la mitad de las alcaldías, lucía serena, algo callada, pero alegre. Es cierto que su administración no ha sido miel sobre hojuelas, sin embargo, la mandamás de la Ciudad de México siempre ha contado con el apoyo irrestricto del Gobierno Federal.