Juan Ramón de la Fuente en su momento fue tentado por las fuerzas oscuras para presentarse como candidato independiente, incluso para ser abanderado de un partido político. Sin embargo, el exrector de la UNAM no se dejó seducir por el canto de las sirenas y aguantó. En esta ocasión el virtual presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, invitó al académico para ser embajador de México ante la Organización de las Naciones Unidas, donde México ha dejado de ser un referente político para América Latina.
El prestigio de Juan Ramón de la Fuente, en algún tiempo secretario de Salud con Ernesto Zedillo, es innegable. López Obrador tiene el interés de que la voz de México sea escuchada. Dos son los temas fundamentales de México ante la ONU: el combate a la corrupción, transparencia en todas las acciones de gobierno, y los derechos humanos, para constatar que se van a respetar.
Por supuesto la invitación está hecha, sólo falta que el próximo Senado lo ratifique; aunque tomando en cuenta que Morena tiene mayoría en el Senado, Juan Ramón de la Fuente no tendrá problemas para llegar a la sede de la ONU en Nueva York.
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