La UV y el Tercer Debate Presidencial

UV
Xalapa, Ver. Instalaciones de la rectoría de la Universidad Veracruzana FOTO: MIGUEL ÁNGEL CARMONA/FOTOVER
- en Opinión

Luis Ramírez Baqueiro / 

“El éxito es ese viejo trío: habilidad, oportunidad y valentía.” – Charles Luckman.

Aun cuando medios en todo el país informaron de los pormenores del Tercer Debate Presidencial organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE) en Mérida, Yucatán, pocos medios dieron relevancia al hecho de la participación de dos Universidades en el desarrollo del mismo.

Y es que, en este último ejercicio democrático, los integrantes del Consejo General del INE que comanda Lorenzo Córdoba Vianello, tomaron en cuenta el amplio espectro de participación ciudadana en los dos anteriores debates a través de las redes sociales.

Ello dio pie a realizar uno exclusivamente con las aportaciones que los mexicanos hicieron tras lanzar una convocatoria para que formularan sus preguntas bajo una serie de criterios muy específicos impuestos por el INE, como el uso de algunos “hashtag” para así acceder al primer filtro en la formulación de sus preguntas.

Este reportero pudo conversar con los responsables del Centro de Estudios de Opinión de la Universidad Veracruzana (UV) dirigido por el Doctor Claudio Rafael Castro López y más específicamente con el responsable del Laboratorio para el Análisis de Información Generada a través de Redes Sociales en Internet (LARSI) de la Máxima Casa de Estudios de la entidad, Carlos Adolfo Piña García durante la transmisión del espacio que conduzco en Grupo Avanradio, misma que puede consultar en https://www.youtube.com/watch?v=hoiBoF6u59w

Es así como pudimos conocer que el LARSI formó parte del grupo de organizaciones expertas que analizaron la conversación digital en redes sociales por ser una de las dos universidades nacionales en contar con centros especializados en el uso y seguimiento de las diversas redes sociales.

Ambos investigadores explicaron que fue a través de la dirección https://centralelectoral.ine.mx, que el INE lanzó una convocatoria a alentar conversaciones digitales específicas en redes sociales respecto de los subtemas que formarán parte del tercer debate, estrategia mediante la cual se pretendió avivar la participación ciudadana.

De esta manera el INE buscó incrementar la conversación digital para posteriormente ser analizada por expertos del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) y del propio LARSI de la UV, con el objetivo de determinar el volumen de las menciones, los temas más recurridos, los conceptos relacionados con estos temas y las preguntas, así como los comentarios más relevantes.

Es así que se pudo obtener un universo de información con el que pudieron determinar qué clase de dispositivos utilizaron, de donde venían las preguntas – es decir de qué región del país-, cuáles fueron las palabras más utilizadas, cuál fue la pregunta más retuiteada, con lo que se pudo integrar un informe al INE.

Castro López precisó que fue principalmente la red social de Twitter la más empleada para la participación de los ciudadanos en la formulación de las preguntas, aun cuando en menor proporción se empleó Facebook.

En el proceso de análisis se debieron procesar un millón 036 mil 037 tuits –referente inicial- para comenzar con el proceso de filtrado adecuado de la información, de ahí se puedo saber que existieron 714 mil 735 mensajes que fueron re-tuits, al final quedaron solamente 321 mil 302 tuits con los que se pudo trabajar para obtener 15 preguntas las cuales serán empleadas por los moderadores para la cuestionar a los candidatos.

De esta manera, cada vez que intervinieron Gabriela Warkentin, Carlos Puig y Leonardo Curzio –moderadores- estuvo presente la UV, hecho por demás significativo en el abonó a la democracia de nuestro país, pero sobre todo, a la confirmación de que nuestra Máxima Casa de Estudios tiene y cuenta con el capital humano capaz de enfrentar retos de gran envergadura.

Bien por la UV que con esto calla muchas bocas, que indirectamente llegaron incluso a cuestionar la capacidad para generar cuadros capaces de poder hacer frente a tareas de gobierno.

Finalmente, vale la pena también reconocer el arrojo de su rectora Sara Ladrón de Guevara, quien, sin mucho protagonismo, confirma que su rectorado marca un antes y un después en muchas áreas de la investigación y aportación científica de nuestro país, a pesar de haber afrontado la peor de las crisis institucionales de la Universidad, resultado de un gobierno estatal de sátrapas que literalmente la dejan en la inanición presupuestal.

Al tiempo.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *