Luis Ramírez Baqueiro /
“Es fácil borrar las huellas, pero difícil es caminar sin pisar el suelo.” – Lao Tse.
Este martes se cumplen los primeros 100 días de Hipólito Rodríguez Herrero al frente de la administración municipal, habrán de pasar 1,340 días más de los 1,460 que compondrán al presente gobierno.
Para algunos estos primeros 100 días han sido el preámbulo del infierno, pues muchas de las ilusiones con que fue llevado al gobierno se difuminaron por la pésima actitud de muchos de los funcionarios menores, los cuales se han encargado de maltratar a empleados y ciudadanos sin ton, ni son.
Aun cuando para el propio munícipe, mucha de la situación que se enfrenta es producto de una “guerra sucia” en su contra y en contra del proyecto alternativo que oferta Morena, la realidad es que poco o muy poco se ha visto desarrollar en la capital.
Infiltrada por personajes de muy baja fama pública mientras colaboraron con Andrés Manuel López Obrador, en el gobierno de la Ciudad de México –la única posición de gobierno que ha sostenido, y de la cual fue desaforado por desacato a determinaciones de la misma SCJN- se continúan a la espera de que se cumpla con el slogan que afirma que “Xalapa Florece”.
Al menos cierto es, Xalapa floreció en estos primeros 100 días, a través de una serie de desatenciones y poca prestación de servicios públicos.
Problemas con el cobro excesivo del agua por parte de la CMAS, han sido uno de los primeros reclamos.
Aun cuando la justificante del munícipe es que se cometieron cientos de irregularidades en la pasada administración del Sistema, sin que se haya interpuesto una sola denuncia penal en contra de la fuerza aérea xalapeña que pasó a cobrar a la caja del organismo, salarios no devengados.
Sumado a ello, los problemas con el suministro del agua, misma que reportan cientos de usuarios son cortados sin previo aviso, mismo que justifican afirmando que esto se da por intentos de sabotear al Ayuntamiento y al organismo administrador.
Cuestionado por este reportero en una amplia entrevista en el espacio que tengo a mi cargo en Avanoticias, el alcalde aseguró también que no escatimará recursos para conformar una nueva policía de proximidad que este a la altura de las necesidades de los habitantes de la capital, que se merecen eso, al precio que sea.
Al señalarle que si este gasto no sería un asunto oneroso, el alcalde sostuvo que las autoridades estatales no lo dejan entrar ni al estacionamiento del Centro Estatal de Capacitación Policial de “El Lencero”.
De igual modo, la ciudad muestra una especie de suciedad y de rezago en la recolección de basura, la justificación del munícipe una vez más obedeció a la supuesta responsabilidad de la pasada administración, toda vez que el camino al relleno sanitario del Tronconal muestra severos daños estructurales, sin que a la fecha la empresa Proactiva, cumpliera con el compromiso de mejorar el camino rumbo al basurero.
Hoy en tres días la ciudad muestra un nuevo rostro, uno que al menos pudiera permitir y decir que en algo se está trabajando, aun cuando todos los xalapeños expectantes observamos el tamaño de la posible estafa.
Calles llenas de parches, que dan ese aspecto de quedarnos a deber; parques llenos de basura, abandonados a su suerte, camellones enmontados, en donde quienes cruzan literalmente debían sacar el machete para poder abrir una brecha.
Acusaciones de amaños en la entrega de obra por parte de la pasada administración formaron parte de sus dichos, unos que a su vez confirman que en eso de decir y hacer, existe un verdadero tranco que al menos en el horizonte no se ve se resuelva pronto.
Así a grandes rasgos se sintetizan los 100 largos días de Hipólito al frente de Xalapa, una metrópoli que no florece y que guarda en su pueblo un altísimo malestar y reclamo por la falsedad de cumplimiento de campaña, un reclamo que seguramente habrán de cobrar los xalapeños.
Al tiempo.
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